Enero, mes de la Prevención de Defectos Congénitos: Pauta preventiva 10

10. Hábitos y estilos de vida: 2. Alcohol.

¿Qué efectos tiene el alcohol durante el embarazo? El alcohol ingerido durante el embarazo, afecta al desarrollo del embrión y del feto. Es decir, que causa alteraciones en cualquier momento del embarazo. Además, es la primera causa no genética de retraso mental (desde leve a profundo), y la tercera causa si incluimos en esa escala la trisomía 21 y la fragilidad del cromosoma X. Pero sus efectos son muchos más.

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¿Cuáles son los otros efectos además del retraso mental? Los efectos del alcohol se producen en cualquier momento del desarrollo prenatal. Esto implica que afecta a: la formación y maduración de los gametos, el periodo que rodea la fecundación y primeras divisiones del cigoto, todo el proceso de desarrollo embrionario, fetal, y tras el nacimiento todo el periodo de lactancia. En consecuencia, causa malformaciones y otras alteraciones en todas las estructuras corporales: el sistema nervioso central, ojos, cara (produciendo labio leporino), corazón y sistema vascular, sistema digestivo (atresia de esófago, e imperforación del ano…), riñones, genitales, brazos y piernas, retraso del crecimiento, y diferentes alteraciones del comportamiento en la infancia (problemas de coordinación, hiperactividad, déficit de atención, problemas de memoria, dificultad de aprendizaje, pobre control de impulsos, bajo rendimiento escolar, déficit de lenguaje expresivo, entre otros).

¿Esos efectos se producen con algunas bebidas o con todas? El efecto no depende del tipo de bebida, sino del contenido total de alcohol que tenga. Por ejemplo, no tiene el mismo riesgo tomar un vaso de cerveza que una copa de coñac. Sin embargo, si se toman tantas cervezas que la cantidad de alcohol ingerida sea similar a la de una copa de coñac, los riesgos serían iguales. En resumen, el efecto depende de la cantidad total de alcohol que se ingiera, independientemente del tipo de bebida.

¿Qué cantidad de alcohol se puede ingerir para que no afecte al desarrollo? Para responder esta pregunta es necesario saber algo sobre la valoración del riesgo en función de las dosis para las diferentes substancias.

El problema de las dosis de las diferentes substancias que causan efectos adversos, está en parte relacionado con las características genéticas de cada persona. Unas características que pueden hacer que cada persona sea muy susceptible o muy resistente. Esto ocurre con el alcohol, si varias personas ingieren la misma cantidad de alcohol (digamos tres copas de coñac), a algunas no les afectará mucho, en otras se notaran ciertos síntomas de intoxicación, y otras estarán borrachas. Por tanto, cuando hablamos de una dosis sin “riesgo” nos referimos a la cantidad media que no incrementa el riego basal de la población; pero ese riesgo se obtiene como promedio del número de personas que no tuvieron efectos adversos, de las que tuvieron efectos pero leves, de otras con efectos menos leves y así hasta las que tuvieron efectos muy, muy graves. En consecuencia, cuando se trata de una persona en concreto que se va a exponer a un factor de riesgo, como no sabemos cual es su nivel de susceptibilidad se le debe indicar la cantidad mínima posible y, si no es necesaria la exposición, que no se exponga.

En el caso de las bebidas alcohólicas, se han observado defectos en niños cuyas madres habían ingerido una copa de vino, o dos cervezas, de vez en cuando durante el embarazo. Por tanto, hoy sabemos que la respuesta a la pregunta ¿Cuánto alcohol se puede tomar durante el embarazo? sólo puede ser una: la UNICA dosis segura es CERO. Además, hay que añadir que esa dosis cero, debe serlo desde los tres meses anteriores durante los que se planifica el embarazo, y que se debe mantener hasta finalizar el periodo de lactancia, y tanto el hombre como la mujer. Que debe hacerlo la mujer es claro, pero ¿por qué también el hombre?. En realidad, el hombre puede no seguirlo si, durante todo ese tiempo desde que se produce el embarazo, mantiene las relaciones sexuales utilizando preservativos. La razón es porque el alcohol (como otros muchos productos químicos) se excreta en el líquido seminal, y puede ser absorbido por la vagina de la mujer embarazada.

Como conclusión, es importante hacer la siguiente reflexión: La planificación del embarazo consiste en conocer cuales son los factores nocivos para el desarrollo del futuro hijo, con objeto de tratar de evitarlos en la medida de lo posible. Sin embargo, si el factor nocivo no es totalmente necesario, no existe justificación alguna para aceptar el riesgo de que el hijo no nazca sano, por muy pequeño que fuera ese riesgo. E igualmente, aquellos que al pasar a la leche puedan alterar su desarrollo postnatal a lo largo de la lactancia. No hay que olvidar que el sistema nervioso central de los recién nacidos, no ha terminado su formación y maduración, por lo que hay que protegerlo de substancias de riesgo.

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